Cinco acciones cotidianas para optimizar el uso del agua en tu entorno.
1. Reducir la salida del flujo del agua de llaves y regaderas, y utilizando sólo la necesaria.
2. Emplear menos productos de limpieza inorgánicos y optar por productos orgánicos.
3. Evitar verter en las tuberías residuos de aceite de cocina y de las latas de atún y mejor vaciarlos en botellas de plástico.
4. Reutilizar el agua de la regadera y de la lavadora para trapear, regar las plantas y llenar los tanques de los inodoros.
5. Tomar baños de no más de 5 minutos y cerrar la llave del agua mientras nos enjabonamos, cuando nos enjabonamos las manos y mientras enjabonamos los trastes.